lunes, julio 10, 2006

Muerto y vivificado

Durante tiempo no entendí claramente el versículo que dice así:

1Pe 3:18 - 20 Porque también Cristo padeció una vez por los injustos, para llevarnos á Dios, siendo á la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu; En el cual también fué y predicó á los espíritus encarcelados; Los cuales en otro tiempo fueron desobedientes, cuando una vez esperaba la paciencia de Dios en los días de Noé, cuando se aparejaba el arca; en la cual pocas, es á saber, ocho personas fueron salvas por agua.

Esto relacionado directamente con aquellos versículos como estos que dicen:

Salmos 6:4-5 Vuelve, oh Jehová, libra mi alma; Sálvame por tu misericordia. Porque en la muerte no hay memoria de ti: ¿Quién te loará en el sepulcro?

y

Hechos 2:22-24 Varones Israelitas, oid estas palabras: Jesús Nazareno, varón aprobado de Dios entre vosotros en maravillas y prodigios y señales, que Dios hizo por él en medio de vosotros, como también vosotros sabéis; A éste, entregado por determinado consejo y providencia de Dios, prendisteis y matasteis por manos de los inicuos, crucificándole; Al cual Dios levantó, sueltos los dolores de la muerte, por cuanto era imposible ser detenido de ella.

Jesús estuvo muerto, y como tal, no tuvo memoria del Padre mientras estuvo en el sepulcro. ¿Que quiere decir el primer versículo de Pedro mencionado recientemente entonces? Y lo que dice Pablo aclara los tiempos de la vivencia de Jesús:

Rom 8:11 Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos á Jesús mora en vosotros, el que levantó á Cristo Jesús de los muertos, vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.

No hubo otro tiempo sino el inmediato posterior a la resurrección, o el inmediato anterior a su muerte, en el cual fue realidad lo mencionado por Pedro.
Y el mismo Espíritu de Dios puede vivificar y sacarnos de muerte a vida eterna. Amén.